Una encuesta reciente realizada por la Asociación de Enfermeras de Ohio concluyó que el sistema de atención médica del estado está en crisis. Basado en una encuesta exhaustiva realizada a enfermeras de todo el estado, este informe saca a la luz las dificultades que enfrenta la profesión de enfermería y su impacto en la seguridad de los pacientes. Subraya el compromiso del sindicato de abogar por soluciones que protejan a las enfermeras y a los pacientes.
Una de las revelaciones más preocupantes de la encuesta de la ONA es el problema de la falta crónica de personal en los centros de atención médica de Ohio. Las enfermeras informaron que la falta de personal es un problema constante que pone en riesgo a los pacientes y a los profesionales de la salud.
La falta de personal ha llevado al sistema de atención sanitaria a lo que la ONA describe como una situación de "CÓDIGO ROJO", en la que la seguridad del paciente puede verse comprometida. Para las enfermeras, la carga física y emocional de la falta crónica de personal es grave. Los turnos largos, los descansos mínimos y la abrumadora carga de pacientes están llevando a muchas de ellas al límite. El informe muestra que el 63 por ciento de las enfermeras de atención directa están considerando abandonar la profesión por completo debido a la carga de trabajo de sus pacientes.
Las enfermeras piden reformas legislativas para abordar el problema. Una demanda clave es que se establezcan normas mínimas de dotación de personal que garanticen una atención más segura a los pacientes y eviten que los hospitales funcionen con escasez de personal. Sin esas normas, el sistema de atención sanitaria seguirá desmoronándose, con más enfermeras que se marcharán y la calidad de la atención a los pacientes se desplomará.
El informe también destaca otro problema alarmante: la violencia en el lugar de trabajo. Las enfermeras se enfrentan cada vez más a situaciones violentas en el trabajo. Los hallazgos de la ONA muestran que el 65 por ciento de las enfermeras de atención directa sufrieron violencia en el lugar de trabajo durante el año pasado, pero solo un pequeño porcentaje lo denunció por temor a que sus preocupaciones fueran ignoradas. Las enfermeras están pidiendo protecciones legales más fuertes, incluyendo mayores sanciones penales para las personas que causan daño a los trabajadores de la salud.
El informe de la ONA no es sólo una advertencia, sino un llamado urgente a la acción inmediata. La declaración "CODE RED" de la ONA enfatiza que el sistema de salud sufrirá daños irreparables si no se interviene. En el informe, el sindicato ofrece demandas claras y viables a los responsables de las políticas y a los ejecutivos de la atención médica, instándolos a abordar la falta de personal y la violencia en el lugar de trabajo. El sindicato también pide una legislación que obligue a los empleadores de atención médica a proporcionar entornos seguros para los pacientes y el personal.
“Los datos de este informe hablan por sí solos: la falta de personal y la violencia en el lugar de trabajo en nuestros sistemas de atención médica son una crisis de atención al paciente que debe abordarse ahora”, afirma Rick Lucas, presidente y director ejecutivo de ONA. “Ohio no puede mantener la tendencia actual de perder enfermeras debido a las condiciones laborales. Tener estándares de dotación de personal legalmente exigibles en todos los hospitales de Ohio y responsabilizar a los ejecutivos de la atención médica por los lugares de trabajo inseguros es crucial para el futuro de la atención médica a fin de mejorar la atención al paciente y garantizar un entorno sostenible y de apoyo para nuestras enfermeras y profesionales de la salud”.
[Comunicado de prensa de Adrienne Coles/ONA]