Miles de enfermeras, médicos, enfermeras practicantes, parteras y otros proveedores de primera línea se están preparando para una huelga histórica contra Providence Health & Services, la empresa de atención médica más grande de Oregon. Los profesionales de la salud están listos para iniciar una huelga el 10 de enero. Los cuidadores exigen soluciones a problemas críticos como la peligrosa falta de personal, la seguridad de los pacientes y salarios justos.
Esta acción histórica abarca varias instalaciones de Providence, entre ellas Providence Portland, Seaside, St. Vincent, Providence Women's Clinic, Milwaukie, Willamette Falls, Medford, Newberg y Hood River. Los médicos y proveedores de práctica avanzada de Providence St. Vincent, representados por la Asociación de Medicina Hospitalaria del Pacífico Noroeste, también forman parte de esta acción.
A pesar de los incansables esfuerzos de los miembros de la Asociación de Enfermeras de Oregon para negociar un contrato justo, Providence continúa sin lograrlo, poniendo en peligro tanto el bienestar de los cuidadores como la seguridad de los pacientes. Los cuidadores luchan por acuerdos que cumplan con la ley de personal de Oregon, garanticen salarios y beneficios competitivos para reclutar y retener personal calificado.
Encuestas recientes destacan la creciente frustración entre los habitantes de Oregón con los servicios de Providence. Los pacientes mencionaron problemas que van desde largas esperas para atención de emergencia y urgencia, dificultad para programar citas, falta de tiempo con los proveedores y facturas elevadas o inesperadas. Los pacientes y los proveedores están de acuerdo en las soluciones, según la encuesta. Cuando se les preguntó sobre formas de mejorar la atención y evitar repetir experiencias negativas con Providence, los pacientes recomendaron constantemente agregar personal de primera línea para mejorar la atención, reducir las esperas y dar a los pacientes más tiempo con sus proveedores. Los pacientes también elogiaron constantemente a las enfermeras de primera línea, los proveedores de atención médica y el personal de Providence por su atención, apoyo y compasión, reconociéndolos como la principal fuente de sus experiencias positivas.
A medida que se acerca la fecha de la huelga, la ONA ha instado a los funcionarios electos a que intervengan, condenando la negativa ilegal de Providence a negociar y citando los riesgos para la seguridad de los pacientes. El sindicato también ha presentado una denuncia por prácticas laborales desleales ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales, exigiendo que Providence vuelva a la mesa de negociaciones para alcanzar un acuerdo justo.
[Adrienne Coles, comunicado de prensa de ONA]